Sesión de embarazo en el estudio y sesión de recién nacido en familia

A pesar de que las sesiones de embarazo en exterior son preciosas, este último año estoy disfrutando mucho de las sesiones en estudio.

Hacer la sesión premamá en el estudio tiene varias ventajas: evitar desplazamientos en busca de la localización “perfecta”, mayor intimidad y comodidad, y un clima más privado para los más tímidos.

En el caso de las futuras mamás el calor (o el frío) pueden ser una gran incomodidad, haciendo incluso que os replanteéis el hecho de hacer la sesión.

Si os sentís muy pesadas el estudio es definitivamente la mejor opción.

También lo es para aquellas familias que buscan unas fotos más íntimas, en las que vosotros tengáis todo el protagonismo.

Es muy habitual en las sesiones de embarazo en estudio realizar fotos en ropa interior, piel con piel, o incluso de desnudo si os sentís cómodos con ello. En este tipo de imágenes siempre busco el buen gusto y la sencillez, utilizando tonos suaves, posturas delicadas y sobre todo, buscando mostrar la belleza del cuerpo de la mujer embarazada.

Una vez tengáis a vuestro bebé con vosotros, durante la sesión newborn, seguimos la misma línea: fotos sencillas, atemporales y emotivas.

Las sesiones premamá suelen realizarse a partir de la semana 28 de embarazo, y las newborn preferiblemente durante los primeros 14 días de vida del bebé, siempre teniendo en cuenta vuestras necesidades particulares.

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